Esta tarde el Partido Republicano lanzó sus propuestas para introducir cambios al sistema penitenciario, como una forma de enfrentar la grave crisis de seguridad que vive nuestro país.
En la iniciativa destacan la construcción de tres mega cárceles para criminales de alta peligrosidad, aumentando la capacidad carcelaria de Chile para llegar a 65 mil plazas y 7 centros penitenciarios adicionales a los que existen hoy, estas nuevas cárceles se propone construirlas alejadas de las ciudades, con perímetros de seguridad en el acceso y con procesos ágiles de licitación y construcción, identificando terrenos fiscales disponibles para acelerar su emplazamiento.
El presidente del partido, Arturo Squella, aseguró que “uno de los elementos fundamentales es recuperar el control total de lo que ocurre al interior de las cárceles. Para ello, proponemos la construcción de tres penales nuevos de máxima seguridad donde se pueda implementar el régimen penitenciario que rige en El Salvador o en Italia”.
Mientras que el diputado Republicano e integrante de la comisión de Seguridad de la Cámara baja, Cristián Araya, recordó la máxima de los gendarmes del país: “‘controlando la cárcel se controla la calle”. “¿Y por qué? Porque conocen perfectamente a quienes han estado privados de libertad, saben cómo funcionan, saben cómo piensan”.
“Evidentemente es el tema penitenciario un pilar fundamental para nuestra política de seguridad. Desde el Partido Republicano estamos trabajando de forma integral una propuesta para enfrentar esta crisis de seguridad. Y en particular para el tema penitenciario vamos a presentar un paquete de proyectos de ley que lo que buscan es precisamente revertir el descontrol que hoy se vive en estos centros”, añadió.
En este sentido, el legislador sostuvo que “esperamos que esta agenda que ha sido trabajada de forma profunda por nuestro equipo, sea acogida y respaldada por este Congreso porque a la hora de enfrentar la delincuencia, no puede haber miramiento y tengan en consideración a quienes hemos estudiado en profundidad para poder enfrentar esta crisis”.
Por su parte, el diputado Republicano de la comisión de Constitución, Luis Fernando Sánchez, recordó que hoy “cerca de 145.000 personas en nuestro país son parte de la población penal en sus distintos regímenes. Sólo 58.000 de estas personas hoy día están en régimen cerrado, más de 69.000 están en régimen abierto y hace poco veíamos en las noticias al ministro de Justicia (Luis Cordero) reclamando porque están colapsadas las cárceles en nuestro país”.
“Bueno para algo lo tenemos a él de Ministro de Justicia, le invitaría a hacerse cargo, porque lo que reclamaba era que al parecer hay mucha gente hoy día cumpliendo prisión preventiva. Si el problema no es el empedrado, señor Ministro, aquí lo que Chile necesita son soluciones, son medidas concretas y es en eso en lo que estamos desde el Partido Republicano”, añadió.
Sánchez también criticó que “hoy día tenemos cerca de 580 presos solamente que están en los centros de estudio y trabajo, 580 de los cerca de 58.000 que les decía, es una vergüenza, nadie se ha hecho cargo durante años”.
En la propuesta Republicana se considera tener recintos penitenciarios más seguros y controlados con tecnología para controlar accesos y comunicaciones, régimen penitenciario más estricto, segmentando a los reos, restringiendo visitas y haciendo obligatorio el uso de uniformes.
Así también, se indica en la propuesta que los presos deben trabajar, estableciendo un amplio régimen de promoción del trabajo en las cárceles, mejoras en el programa de formación de Gendarmería de Chile; revisar los beneficios y el cumplimiento alternativo de penas, expulsión expedita de inmigrantes irregulares que cometen delitos agregando como sanción el cumplimiento efectivo en caso de reingreso al país y tolerancia cero a los reincidentes.